En el marco de la Semana Santa, periodo en el que aumenta significativamente la compra y el consumo de pescado y mariscos, el Servicio Nacional de Salud Animal (SENASA) del Ministerio de Agricultura y Ganadería recuerda a la población la importancia de adquirir y consumir estos productos de manera segura, con el objetivo de prevenir riesgos para la salud.
 
Para garantizar la inocuidad y calidad de los productos pesqueros, SENASA recomienda:
 
Comprar en establecimientos autorizados:
 
Adquiera pescados y mariscos únicamente en comercios registrados y supervisados por la autoridad sanitaria respectiva. Evite adquirir productos de dudosa procedencia o que se vendan en la vía pública.
 
Verificar la frescura del pescado:
 
Los ojos deben ser brillantes, transparentes y ocupar completamente la cavidad orbitaria.
Las branquias (agallas) deben tener un color rosado o rojo intenso, y mantenerse húmedas y brillantes.
Las escamas deben estar firmemente adheridas a la piel y presentar un brillo metálico.
El olor debe ser fresco y natural, sin rastros de amoníaco.
 
Pescado seco: Debe tener un color uniforme entre blanco y amarillo, sin manchas rojas, y su aroma debe ser característico y no artificial.
 
Moluscos, calamares y pulpos:
 
La carne de los moluscos debe ser firme, adherida a la concha y con un olor agradable.
Calamares y pulpos deben tener una consistencia firme, con piel húmeda y brillante, de color blanco o gris claro.  
   
 
Productos enlatados: Revise que las latas no presenten abolladuras, abultamientos o señales de óxido. Al abrirlas, no deben liberar gases ni desprender olores extraños.
 
Almacenamiento y preparación adecuados:
 
Mantenga los productos frescos en refrigeración o congelación inmediatamente después de la compra.
Evite descongelar y volver a congelar los alimentos.
Procese y consuma los productos lo antes posible para evitar su descomposición.
Control y vigilancia.
 
En 2024, SENASA realizó 517 inspecciones en establecimientos que procesan alimentos de origen acuático, incluyendo plantas de camarón, tilapia, trucha y pescado de mar, así como en embarcaciones, muelles pesqueros y expendios de pescado. Estas acciones buscan garantizar que la población tenga acceso alimentos seguros y de calidad.